Según el último informe del INDEC sobre ventas en supermercados correspondiente a abril de 2025, Formosa muestra señales contradictorias: por un lado, tuvo un incremento interanual del 9,4% respecto al mismo mes de 2024, pero al compararse con abril de 2023, registra una caída del 34,3%, la mayor del país.
Este aparente repunte mensual se explica en gran parte por la baja base de comparación, ya que abril de 2024 había marcado uno de los peores niveles de consumo en supermercados. Sin embargo, los datos dejan en evidencia que la recuperación es solo superficial: las ventas actuales siguen muy por debajo de los niveles previos, incluso en los rubros esenciales.

En la comparación de abril 2025 contra el mismo mes de 2023, todos los rubros evaluados en Formosa presentan caídas. Algunos de los más pronunciados fueron en carnes (-40,8%), rotisería (-43,6%), bebidas (-41,7%) y productos de limpieza (-36,2%), lo que evidencia el deterioro del poder adquisitivo y una marcada retracción del consumo incluso en bienes básicos.
La situación se agrava al observar los datos acumulados del primer cuatrimestre del año. En este período, Formosa presenta una baja del 2,5% respecto a igual lapso de 2024 y una caída del 25,2% frente al primer cuatrimestre de 2023, lo que la posiciona como la provincia con el peor rendimiento del país.
En contraste, provincias como Tierra del Fuego (+14,8%), Río Negro (+13,5%) y Neuquén (+1,6%) muestran desempeños positivos acumulados, revelando una fuerte disparidad territorial en la evolución del consumo.
Este panorama en Formosa refleja con crudeza las dificultades que atraviesan los hogares para sostener niveles mínimos de compra, incluso en supermercados, ámbito que concentra buena parte del abastecimiento familiar. El dato no solo es un termómetro del consumo.