En medio de los reclamos gremiales por aumento salariales y bono para fin de año, el gobierno provincial salió a dar explicaciones sobre su política de ingresos para los trabajadores estatales. El subsecretario de Hacienda, Miguel Antinori, enfatizó que “este año hubo un 55% de incremento salarial en las remuneraciones de los agentes estatales, contrastado con un nivel de precios acumulados a noviembre del 28%, según el INDEC“.
Estas cifras, según el funcionario, reflejan “el esfuerzo del Gobierno provincial en sostener el poder adquisitivo de sus trabajadores“, en un contexto económico adverso marcado por la caída de la recaudación provincial.
Antinori reafirmó que la gestión del gobernador Gildo Insfrán “tiene ordenadas sus cuentas fiscales”, lo que permite “afrontar los sueldos de diciembre y el SAC del segundo semestre, a pesar de la sostenida caída de la recaudación de ingresos provinciales”.
En declaraciones a medios oficiales, el subsecretario reprochó a quienes intentan desacreditar a la provincia al sostener que “vive de la coparticipación o no presenta estados contables razonables”. De forma categórica, aseguró que “la realidad es totalmente lejana a esa afirmación”.
Antinori recordó que desde 2005 Formosa está adherida a la denominada Responsabilidad Fiscal y a las buenas prácticas de gobierno, “con las cuales la provincia cumple a rajatabla y los recursos, vale resaltar, les son propios asignados por Ley de Coparticipación Federal”.
Esta gestión responsable de las cuentas públicas, según el funcionario, es lo que permite que la administración de Insfrán impulse “el proceso de avance en el desarrollo del Modelo Formoseño“.
El subsecretario destacó que el Presupuesto Provincial destina el 65% de sus erogaciones al rubro de servicios sociales, que incluye salud, seguridad y promoción social. Esta distribución, afirmó, demuestra “una vez más que Formosa no abandonó la lógica del orden en las cuentas públicas, y tampoco a la sociedad“, manteniendo una significativa inversión social y en obras de infraestructura.
Para reforzar su argumento ante los gremios, Antinori contrastó la situación provincial con la nacional. Señaló que a nivel federal “el incremento ronda el 18% anual, agregado a ello un impacto de despidos de más de 58.000 agentes públicos“.
Además, subrayó que el valor mínimo de bolsillo garantizado en Formosa es de $880.000, con un incremento del 63% en el año, mientras que en el orden nacional asciende a $334.800, “evidenciando la notoria disparidad en detrimento de los empleados del orden federal“.

