El intendente de Laguna Naineck, Julio Murdoch, salió al cruce de las declaraciones de la Federación Agraria de su localidad y expresó que “es increíble el oportunismo político de Pánfilo Ayala” al endilgar al gobierno provincial una crisis climática “cuyo cultivo más afectado es la banana, totalmente dependiente del agua”.
“Pareciera que el presidente Javier Milei se puso de acuerdo con el gobernador de la provincia, Gildo Insfrán, para encaminarnos hacia la desaparición total”, dijo Pánfilo Ayala, presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA) filial Laguna Naineck a LA NACION.

En las criticas al dirigente agropecuario, Murdoch cometió un desliz: “en 2023 por la misma crisis climática el Gobierno de la provincia de Formosa declaró la emergencia del sector. Fue homologado y debía realizarse un aporte de 600 millones de pesos por parte de Nación, que hoy a valores nominales sería superior a los 1500 millones de pesos y, en realidad, la falta de efectivización pasó a formar parte del déficit cero maquillado que ostentan”
En realidad, en abril de 2023 el Ministerio de Economía de la Nación, mediante la Resolución 428/2023, declaró el estado de emergencia y/o desastre agropecuario en diversas localidades formoseñas.

Esta medida, publicada en el Boletín Oficial el 14 de abril, abarcaba explotaciones de cucurbitáceas afectadas por granizo desde octubre de 2022 y cultivos de banana dañados por heladas tardías y sequías desde agosto del mismo año. La emergencia incluía localidades como Laguna Naineck, Laguna Blanca, Riacho He Hé y Buena Vista, entre otras.
Sin embargo, pese a la declaración oficial, los fondos destinados a mitigar el impacto económico de estas catástrofes nunca llegaron a los productores.
Murdoch en el intento de cuestionar la administración de Javier Milei, reconoce que los fondos no fueron girados por el Gobierno anterior.
A nivel nacional, el entonces ministro de Economía, Sergio Massa, había asegurado que se ampliarían los beneficios para los productores afectados por la sequía y que parte de los recursos generados por el tipo de cambio diferencial serían destinados al sector.
Estas promesas tampoco se vieron reflejadas en la práctica, dejando a los productores formoseños enfrentando la adversidad sin el respaldo prometido.
Los productores, que enfrentaron condiciones climáticas extremas, siguen esperando respuestas concretas mientras luchan por sobrevivir en un escenario de incertidumbre económica y falta de apoyo institucional.