Un grupo de 11 familias encabezadas por madres solteras con hijos menores continúa ocupando desde el domingo un terreno municipal en el barrio La Maroma, del Circuito 5, en lo que representa un nuevo capítulo de la crisis habitacional que atraviesa la provincia. Ante la persistencia de la toma, la Municipalidad confirmó que iniciará acciones legales para recuperar el predio.
El responsable del Banco de Tierras municipal, Diego Luque, explicó en Algo está pasando que se trata de un terreno de aproximadamente 100 por 200 metros que pertenece al dominio privado del municipio y que está destinado a un uso específico como espacio verde.
“Es una toma de terrenos que se produjo el domingo. Fuimos con el asesor legal y nos hicimos presentes para explicarle a la gente el error que están cometiendo. Entendemos el pedido pero no podemos darlo, porque esto constituye la comisión de un delito”, declaró Luque.
El funcionario detalló que el primer acercamiento del municipio fue con intención conciliatoria. “Nuestra actitud es siempre la de conversar y explicar, porque por ahí la gente está mal informada o mal asesorada. Queremos evitar que se vean envueltos en un proceso legal”, expresó.

Sin embargo, el diálogo no prosperó. “Yo personalmente hablé con la gente, le expliqué que no es así, pero lamentablemente no tuvimos eco y aún siguen en esta postura“, lamentó Luque.
El responsable del Banco de Tierras aclaró que existen “otros caminos legales y otras opciones” para atender las demandas habitacionales, pero que la ocupación ilegal “no va a llegar a ningún lado, al contrario, les va a perjudicar”.
Ante la continuidad de la ocupación, el municipio ya activó los mecanismos legales correspondientes. “El día domingo nos hicimos presente en la comisaría subdelegacional e hicimos la denuncia correspondiente. Ya está todo listo para iniciar el amparo y presentarnos también en la causa que se formó en el ámbito penal“, confirmó Luque.
El funcionario destacó que, si bien el grupo inicial se redujo considerablemente desde el domingo, la administración municipal “no puede quedarse de brazos cruzados ante esta situación” por tratarse de una “ocasión de perjuicio al patrimonio del municipio“.
Esta no es la primera ocupación ilegal en la zona. Según Luque, hace aproximadamente un mes se registró una situación similar que se resolvió pacíficamente. “La gente después de que nos presentamos y hablamos con ellos, entendieron y se ubicaron en forma pacífica“, recordó.
En esta oportunidad, sin embargo, las familias “están insistiendo”, aunque el responsable municipal reiteró que “como municipio no es confrontar ni llegar a algo violento, porque son vecinos, son ciudadanos también“.
Las mujeres que protagonizan esta toma denuncian que los alquileres en la zona superan los 300.000 pesos mensuales para un ambiente, mientras que sus ingresos informales no les permiten acceder al mercado formal de vivienda.
Luque advirtió que estas personas “deberían evitar ser víctimas del momento, porque a veces están mal asesorados o mal informados y eso les lleva a tomar decisiones” que solo las perjudican, ya que “las acciones legales se van a llevar adelante”.