Durante el debate por la reforma de la Carta Magna provincial, el convencional de La Libertad Avanza, Pablo Míguez, volvió a levantar la temperatura de los oficialistas porque los cuestionó por la falta de transparencia en el proceso y acusó al oficialismo de ocultar información clave.
“Venir acá y desayunarnos con lo que nos dicen, con lo que nos tiran, con las migajas que nos dan para que podamos tratar de entender qué es lo que quieren hacer. Y son unos genios del mal, porque esa es la verdad”, disparó Míguez, que suele tener un perfil polémico.
El libertario sostuvo que la nueva Constitución que impulsa el gildismo “ya era demasiado complicada y enmarañada”, y señaló que las reformas que se pretenden introducir persiguen objetivos ocultos. “No les costaba nada respetarnos un poco. No les costaba nada decirnos: ‘Miren, acá está, esto es lo que vamos a reformar en la comisión. Estúdienlo’. Sin embargo, ni eso hicieron”, agregó.
El momento más álgido de su intervención llegó cuando afirmó: “Porque no respetan a nadie, porque les importa una mierda lo que hacen”, frase que provocó el inmediato enojo de convencionales del oficialismo y la presidente de la Convención, Graciela de la Rosa, lo llamó al orden.
Pese a los llamados al orden, Míguez insistió en que el proceso se lleva adelante con secretismo y falta de diálogo. “No fueron capaces de demostrar que son lo que dicen que son, porque no lo son”, cerró en medio de un clima de fuerte tensión política dentro del recinto.