La diputada nacional por el PRO y presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, Sabrina Ajmechet, calificó como “histórico” el desarrollo de una sesión de la comisión en la provincia de Formosa, donde escucharon más de una decena de testimonios sobre violaciones a los derechos humanos.
“Fue realmente un día histórico en la Argentina. Todos sabemos que Formosa es una isla de autoritarismo. Hay violaciones a los derechos humanos repetidas veces y, sin embargo, no se les presta la atención que merecen”, afirmó la legisladora en Algo está pasando.
Ajmechet destacó el carácter institucional de la visita, que incluyó a legisladores de diferentes bloques políticos. “Que una comisión del Congreso Nacional haya sesionado en Formosa para escuchar a los formoseños es un cambio histórico frente a lo que se venía dando”, remarcó.

Consultada sobre los pasos a seguir, sostuvo: “Los verdaderos valientes son quienes denunciaron, pero deben saber que nuestros ojos siguen puestos en Formosa. Llevaremos sus voces a los medios nacionales y al Congreso para que todos los argentinos sepan lo que está pasando”.
Durante la jornada, según relató, se hicieron presentes emisarios del gobierno provincial. “El gobernador mandó a alguien a la reunión a informarle lo que pasaba. No nos asusta. Hay muchos formoseños que ya no tienen miedo, porque perdieron todo: hijos, justicia, asistencia. ¿Cómo no van a perder también el miedo?”, señaló Ajmechet.
La diputada también respondió a las críticas por la supuesta utilización electoral del acto, y lamentó la ausencia del vicepresidente de la comisión, el diputado Fernando Carvajal. “Insinuar que hubo uso partidario de los derechos humanos es una barbaridad. Lo único que hubo fueron víctimas exponiendo abusos del gobierno de Insfrán”, dijo, y apuntó que quienes no participaron “fueron funcionales al poder”.
Sobre el escenario electoral, Ajmechet fue contundente: “El pueblo formoseño hoy no es libre. Me transmitieron que tienen miedo, que creen que los siguen, que saben cómo votan. Temen perder el trabajo o que presionen a su familia”.
Sin embargo, Ajmechet fue más allá y advirtió sobre el clima de miedo que domina la vida pública y electoral en la provincia. “Los formoseños creen que los van a seguir cuando van a votar, que el gobierno sabrá cómo votan. Tienen miedo de perder su trabajo, miedo de que presionen a su familia. Hay un miedo estructural, instalado desde hace años. Es un pueblo que no se siente libre”.
En ese sentido, y a dos semanas de las elecciones para convencionales constituyentes, se mostró escéptica sobre la posibilidad de un comicio limpio: “¿Me sorprendería un nuevo triunfo de Insfrán? No, la verdad que no. Lo que vi en la ciudad de Formosa fue escandaloso: la cantidad de carteles del mismo candidato por cuadra es una locura. No se ve en ningún otro lugar del país. Eso no es libertad ni transparencia”.
“Con ese nivel de intimidación, no puede haber una elección libre. Ver la ciudad empapelada con carteles de un solo candidato, en cada cuadra, es escandaloso. Esa cantidad de dinero no se ve en ninguna otra provincia”, remató.
Finalmente, admitió que un nuevo triunfo del oficialismo en las urnas no la sorprendería. “Tal vez gane otra vez Insfrán, lamentablemente. Pero lo que tenemos que lograr es que el pueblo formoseño recupere la libertad y deje de votar con miedo”, concluyó.