Los festejos de Navidad en Formosa expusieron un fuerte uso de pirotecnia de alto impacto sonoro pese a la ordenanza, aprobada en septiembre, que prohíbe la venta y uso.
La presidenta de Camino Azul TEA Formosa, Florencia Santa Cruz, compartió su indignación y tristeza tras recibir numerosos mensajes de familias que enfrentaron momentos angustiantes debido a las explosiones.
“Desde temprano comenzaron a llegar mensajes de madres diciendo que sus hijos estaban debajo de la cama o llorando en el baño por el ruido. Me preguntaba qué más tiene que pasar para que la sociedad entienda el daño que genera la pirotecnia“, relató Santa Cruz en Algo está pasando (FM 94.1).

Aunque reconoció el acompañamiento del gobierno municipal en la difusión de la ordenanza y la educación en las escuelas, aunque hizo hincapié en la falta de empatía por parte de la comunidad. “Vimos puestos clandestinos con filas de personas comprando, incluso con niños a su lado. Es un problema cultural y social que requiere tiempo y esfuerzo para cambiar”, enfatizó.
La ordenanza de pirotecnia cero, aprobada en septiembre, prohíbe la venta de productos no habilitados. Sin embargo, según Santa Cruz, los controles no fueron suficientes. “El Circuito Cinco parecía un mercado de pirotecnia, se vendían como caramelos. Necesitamos que se apliquen multas y se refuercen los controles. Cuando se toca el bolsillo, la gente empieza a respetar las normas”, sostuvo.
El impacto de la pirotecnia también quedó reflejado en los reportes del cuerpo de bomberos, que registró dos menores heridos por manipular estos productos. “Detrás de cada niño con pirotecnia hay un adulto responsable. La educación empieza en casa, enseñando alternativas seguras para celebrar”, agregó.
Camino Azul TEA Formosa está organizando reuniones con autoridades municipales y policiales para evaluar lo ocurrido en Navidad y planificar acciones para Año Nuevo. “Seguiremos trabajando para que la sociedad entienda la importancia de respetar esta ordenanza. Ojalá nunca tengan que vivir lo que vivimos nosotros al ver a nuestros hijos sufrir”, concluyó Santa Cruz.