En una jugada que sorprendió por su amplitud política, el senador nacional por Formosa, José Mayans, se unió con referentes del radicalismo, el PRO y espacios provinciales para impulsar dos proyectos de ley que apuntan directamente al corazón del esquema financiero del Gobierno nacional. El objetivo: reforzar las transferencias automáticas a las provincias y desarmar fideicomisos que hoy administra discrecionalmente la Casa Rosada.
Las iniciativas fueron acompañadas por los jefes de bloques parlamentarios como Eduardo Vischi (UCR-Corrientes), Alfredo De Ángeli (PRO-Entre Ríos) y Carlos Espínola (Provincias Unidas), quienes pusieron sus firmas junto a Mayans para enviar un mensaje político claro: todos los gobernadores –incluso los cercanos a Javier Milei– respaldan el reclamo por un reparto más justo y transparente de los recursos nacionales.

El primer proyecto modifica la Ley de Presupuesto Permanente (11.672) para que los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) se distribuyan de forma diaria, automática y pasen a integrar la masa coparticipable. “Son recursos que no son propios del Gobierno nacional, y no afectan el equilibrio fiscal”, argumentaron los senadores en el texto.
La segunda propuesta va aún más lejos: propone eliminar una serie de fideicomisos como los de Infraestructura Hídrica, Transporte, el Fondo Compensador del Transporte, el Fondo Eléctrico del Interior y el Fondo Nacional de la Vivienda. Esos fondos, hoy manejados con escaso control, serían coparticipados entre Nación y provincias conforme a la Ley 23.548.
Además, se modifica el régimen del impuesto a los combustibles para que una mayor porción de lo recaudado se destine directamente a las provincias, al Tesoro Nacional y al sistema previsional, asegurando así un flujo más justo y federal.
Desde la oposición aseguran que estas medidas no solo alivian la crítica situación financiera de muchas provincias, sino que también ponen fin a un manejo centralizado y opaco de fondos públicos. “Esta es una propuesta federal, que fortalece a las provincias sin romper el equilibrio fiscal, y que va en línea incluso con la promesa del Gobierno de eliminar estructuras paralelas al presupuesto”, señaló Mayans.