En un hecho que refleja las fisuras cada vez más visibles dentro del gildismo, la localidad de Ibarreta se encuentra sumida en un conflicto entre el intendente Adán Jarsinsky y el Concejo Deliberante escaló en las últimas semanas..
La disputa gira en torno al aumento de la Unidad Tributaria Municipal (UTM), una medida dispuesta por decreto por el Ejecutivo, que llevó el valor de $7 a $900 sin la correspondiente aprobación legislativa.
El Decreto 539/24, ratificado por el Decreto 165/25, sostiene que la UTM se fijó con un criterio “razonable” tomando como referencia el precio de un litro de nafta. Sin embargo, desde el Concejo aseguran que esa equivalencia no existe en el Código Tributario vigente, y denuncian que se trata de una maniobra ilegal.
“El intendente no tiene facultades para fijar el valor de la UTM. Esa potestad es exclusiva del Concejo, conforme a los artículos 40, 41 y 87 de la Ley Orgánica de Municipios 1028”, sostuvo Medgar Méndez, presidente del Concejo y dirigente cercano al diputado provincial Armando Cabrera.
La postura fue acompañada por Heliana Rivero, vicepresidenta del cuerpo, quien acusó al Ejecutivo de “dictar actos administrativos sin competencia ni procedimiento legal alguno”.
La Ordenanza N° 2.127/2025, sancionada el 26 de marzo por unanimidad del Concejo, intentó revertir el decreto del Ejecutivo. Pero el intendente Jarsinsky respondió vetando la ordenanza y ratificando el decreto anterior.
“La ciudadanía queda rehén de un Ejecutivo que actúa fuera de la ley y de un Concejo que no puede ejercer plenamente sus funciones”, advierten desde el entorno legislativo. En este clima de enfrentamiento, se evidencian no solo diferencias jurídicas, sino una interna política feroz.

El trasfondo de la crisis parece estar vinculado al alineamiento del Concejo con el dirigente Armando Cabrera y su asesora estrela Milagros Alvarenga, quienes en los últimos tiempos ha tomado distancia de Jarsinsky. En esa tensión, Méndez y Rivero representan una avanzada del sector de Cabrera en un distrito clave.
El intendente Ibarreta estuvo envuelto en una escandalo cuando agredió de “un cintazo” al ex director del Hospital de Ibarreta, Maximiliano Ledesma, por una discusión previa con la pareja del representante del ejecutivo.
Esta interna comenzó a tener capítulos públicos antes de la definición de la lista de concejales en las que Cabrera pretender imponer sus nombres y usar los recursos de la intendencia para la campaña.